La industria cárnica lleva varias décadas confiando en la ciencia para avanzar en la mejora de la calidad y la seguridad de sus productos. La investigación y la innovación son, desde hace años, elementos clave a la hora de optimizar las cualidades organolépticas y nutricionales de la carne y los derivados cárnicos, para dar respuesta de este modo, por un lado, a las demandas de un consumidor cada vez más exigente, y por otro, a los requisitos sanitarios de las instituciones alimentarias.
Así, tal y como señalan desde la plataforma Carne y Salud, se han logrado avances significativos en cuanto la mejora de la calidad nutricional, como la puesta en marcha de nuevas tecnologías capaces de modificar el perfil nutricional de alimentos como los derivados cárnicos reduciendo su contenido en grasa o sal o sustituyendo ciertos aditivos por otros productos naturales como cebolla o pimienta negra.
En cuanto a la mejora de la calidad organoléptica de la carne, se han desarrollado técnicas como la microencapsulación, consistente en recubrir determinados compuestos de interés alimentario con materiales específicos para que se liberen de manera controlada o gradual con el objetivo de evitar el deterioro de las características sensoriales o protegerlo frente a agentes externos alterantes.
Otro de los avances significativos, fruto de la inversión en investigación e innovación por parte de la industria cárnica, es el desarrollo de nuevas técnicas de conservación y envasado, aspecto esencial para ampliar el tiempo de vida útil de los alimentos.
Asimismo, señalan también desde Carne y Salud la importancia de la implantación de tecnologías de visión artificial, que aseguran un mayor nivel de seguridad en la producción de derivados cárnicos y, con respecto a la trazabilidad, de nuevos sistemas de gestión y control específicos, como los chips de radiofrecuencia.
Avances, todos los mencionados, destinados a proporcionar al consumidor una mejor experiencia a la hora de consumir carne y derivados con la certeza de estar haciéndolo bajo las mejores condiciones de seguridad alimentaria.
Dando continuidad a las acciones y actividades que se van a desarrollar dentro de la Cátedra Universitaria de Empresa Investigación en proteína animal, nutrición y salud de la Organización Interprofesional de la Carne de Vacuno de España (PROVACUNO) y Universidad Católica de Murcia (UCAM), Clara Noguera se incorpora como investigadora a esta Cátedra.
Doctorada en Ciencias de la Salud este año por la UCAM, Clara cuenta con experiencia en investigación aplicada en biología molecular, bioquímica y cultivos celulares, y un amplio conocimiento en técnicas de laboratorio y desarrollo de ensayos clínicos y preclínicos.
La Organización Interprofesional de la Carne de Vacuno de España, Provacuno, está presente del 4 al 8 de octubre en ANUGA 2025, la feria de alimentación y bebidas más grande del mundo y que cada dos años se celebra en Colonia (Alemania). Provacuno está aprovechando su presencia en esta cita global para dar a conocer la nueva campaña “Por una Europa sostenible, la misión especial del vacuno”, que, junto a Apaq-W (Bélgica) y cofinanciada por la Unión Europea, desarrollará durante los próximos tres años.
Para Javier López, director de Provacuno, ANUGA 2025 “es el punto de encuentro de los principales profesionales del sector a nivel mundial, lo que la convierte en el escenario ideal en el que presentar nuestra nueva campaña, y una oportunidad para mostrar los grandes avances que el sector del vacuno de carne europeo viene realizando en la mejora de la sostenibilidad en sus tres dimensiones económica, social y medioambiental, en general, y en lo referente a la disminución de emisiones y a la prevención de la degradación y mejora del suelo, en particular”.