Para que un futbolista rinda en el terreno de juego, su alimentación ha de ser correcta y equilibrada. En la Federación Española de Fútbol (RFEF) son conscientes de ello y se toman muy en serio este aspecto.
De hecho, el catedrático de Nutrición y especialista en Endocrinología y Medicina Deportiva, Antonio Escribano, director de la Unidad de Nutrición, Metabolismo y Composición Corporal de la RFEF, señaló, en un encuentro con periodistas de EFE en colaboración de la Plataforma Carne y Salud para tratar sobre rendimiento deportivo, competitividad y alimentación, que de la alimentación del futbolista depende su actuación en el campo: "El fútbol se juega corriendo; el músculo tiene una capacidad de despliegue motora para la que hace falta combustible, y ese combustible es la alimentación".
Para el responsable del plan de alimentación de la selección española, entre los nutrientes que deben incluir los jugadores en sus dietas ricas y variadas no debe faltar la carne.
El componente fundamental en el fútbol es el glucógeno, hidratos de carbono presentes en el músculo y el hígado, menciona Escribano, quien ubica en este "combustible" el esfuerzo de alta intensidad, relacionado con la velocidad y la potencia."Hay que hacer una planificación muy exacta de los carbohidratos; en el caso de la carne, que contiene proteínas, vitaminas y minerales que no son combustible pero actúa como coadyuvante, tiene que estar presente porque es fundamental para el rendimiento general del futbolista", señala.
De hecho, si se analiza el menú diario de los jugadores de la selección española en el Mundial de Rusia, se cae en la cuenta de la extraordinaria importancia que el experto nutricionista concede a la carne, en particular la de vacuno.
Así, mientras que la comida principal cuenta con gazpacho, salmorejo y ensaladas de entrante y pasta fresca de primero, en el segundo plato no falta la carne de vacuno. Elaboraciones como el solomillo o las albóndigas, acompañados de verduras y alternados con pescados a la plancha, son fundamentales en el día a día de nuestra selección.
También hay presencia de carne en la cena, concretamente en los canelones o lasaña de ternera del primer plato, después de las cremas de verdura del entrante.
A nivel general, Escribano considera que el sector productor cárnico "está siendo tratado injustamente", defiende su consumo en la población general de forma moderada, y aconseja: "El sector cárnico debe basarse en la ciencia y la divulgación científica para combatir los ataques que recibe, con estudios sobre las consecuencias finales de no consumir carne".
Y concluye: "La comida es como una partitura musical; todas las notas tienen que estar en su sitio. No se pueden quitar notas".
Dando continuidad a las acciones y actividades que se van a desarrollar dentro de la Cátedra Universitaria de Empresa Investigación en proteína animal, nutrición y salud de la Organización Interprofesional de la Carne de Vacuno de España (PROVACUNO) y Universidad Católica de Murcia (UCAM), Clara Noguera se incorpora como investigadora a esta Cátedra.
Doctorada en Ciencias de la Salud este año por la UCAM, Clara cuenta con experiencia en investigación aplicada en biología molecular, bioquímica y cultivos celulares, y un amplio conocimiento en técnicas de laboratorio y desarrollo de ensayos clínicos y preclínicos.
La Organización Interprofesional de la Carne de Vacuno de España, Provacuno, está presente del 4 al 8 de octubre en ANUGA 2025, la feria de alimentación y bebidas más grande del mundo y que cada dos años se celebra en Colonia (Alemania). Provacuno está aprovechando su presencia en esta cita global para dar a conocer la nueva campaña “Por una Europa sostenible, la misión especial del vacuno”, que, junto a Apaq-W (Bélgica) y cofinanciada por la Unión Europea, desarrollará durante los próximos tres años.
Para Javier López, director de Provacuno, ANUGA 2025 “es el punto de encuentro de los principales profesionales del sector a nivel mundial, lo que la convierte en el escenario ideal en el que presentar nuestra nueva campaña, y una oportunidad para mostrar los grandes avances que el sector del vacuno de carne europeo viene realizando en la mejora de la sostenibilidad en sus tres dimensiones económica, social y medioambiental, en general, y en lo referente a la disminución de emisiones y a la prevención de la degradación y mejora del suelo, en particular”.